Pelar un pepino y cortarlo en rodajas, a continuación cortar asimismo una manzana en gajos, tratando de dejar la menor cantidad de corazón posible.
Extraer el jugo de pepino y manzana y reservarlo.
Pelar también el segundo pepino y cortarlo a dados pequeños.
Cortar a dados la manzana sin pelarla.
Reducir el filete de lubina a tartar.
En un cuenco, juntar el pepino, la manzana y la lubina, y después aderezar con aceite, sal y pimienta.
Hidratar una lámina de pan carasau en agua y luego cortarla según la forma y el tamaño deseados.
Colocar el pan carasau en una bandeja recubierta con papel de horno y aliñar con aceite y sal.
Secarlo en el horno a 200 °C unos siete minutos hasta que quede dorado y crujiente.
Emplatar el tartar en un plato hondo con la ayuda de un molde circular sin fondo y luego verter el zumo de manzana y pepino.
Decorar con hinojo silvestre y acompañar con pan carasau crujiente.